El fenómeno de Lionel Messi trasciende las canchas de fútbol y ahora en el área de Miami también llega a las tablas.
Se acaba de estrenar con gran éxito de público la obra “Mi novio me engaña con Messi”, una comedia que revela el conflicto de una pareja debido a que el personaje llamado también Leo es un hincha patológico del fútbol, en particular del crack argentino, y su novia Claudia siente que está en un segundo plano.
Bruno Gatti, el autor de la obra, interpreta el papel del “novio” y Andrea Estévez, la productora del espectáculo, es su batalladora compañera que jamás renuncia a ser desplazada por un juego de pelota.
Entre sus muchas particularidades, la historia es narrada como si fuese un partido de fútbol. Incluso interviene el VAR y cuando hay excesos de los protagonistas se les muestra la tarjeta amarilla o la roja, según la gravedad de la falta.
El narrador es el conocido personaje de la televisión Fernando Fiore, quien cae como anillo al dedo en la trama, y además improvisa un monólogo de siete minutos que le aporta un toque de drama a la comedia.
Leo, el fanático, de manera simultánea participa en un concurso de televisión, “El MessiLoTodo” con un millón de dólares como premio mayor, y demuestra un conocimiento extraordinario sobre el astro argentino.
Claudia, por su parte, ha vivido a la sombra del fútbol porque su padre y su exmarido han sido futbolistas y sabe lo que eso supone.
La llegada de Messi al Inter Miami fue como si hubiera encendido la chispa para que las estrellas se alinearan y pudiera montarse esta comedia.
“Empecé a escribir esta historia antes de la llegada de Messi a Miami”, comentó Gatti.
“Soy fanático de Messi, no al punto del personaje de la obra teatral, pero su humildad siempre me atrajo porque lo hace más ídolo”.
Al principio, Gatti la había escrito como una comedia corta. Incluso tuvo un estreno mundial en Colombia. El tema daba para más, sin embargo, y en consecuencia se fueron añadiendo otros elementos.
“Yo quería agregar una voz en medio de los personajes”, comentó Gatti. “Cuando conocí a Fiore surgió la idea de incorporar un monólogo y así se agrega un escena muy sentida”.
El ingenio de esta comedia también se advierte en la intención de hacer participar a los asistentes. En una escena en un bar se invita a dos parejas del público y el resultado es inesperado.
Se utilizan también elementos multimedia, se proyectan escenas de los grandes momentos de Messi en el fondo del escenario y hay retransmisiones deportivas de algunas de las instancias más memorable de la selección albiceleste.
“A mí me gusta el fútbol y junto con el teatro quería juntar estas dos pasiones”, reveló Gatti.
“La idea puntual es atraer a gente que no está acostumbrada al teatro. Es algo diferente”.
Podría decirse que el fútbol es una excusa para explorar las complejidades del amor y las relaciones humanas. De una manera exagerada se enfoca el choque de pasiones que a veces se producen en la convivencia.
Lo hermoso de esta obra es que tras la crisis de los protagonistas se logra el entendimiento, se delimita el territorio de cada uno de los personajes y de esta manera la moraleja es que con amor se puede lograr una vida llevadera en pareja.
Gatti, de 39 años, es contador público de profesión, pero cuando tenía 28 años tomó sus primeras clases de arte escénico en su natal Mar del Plata, en Argentina, y aquello le abrió un nuevo mundo.