Cuando Donovan Mitchell explicó que renovaba su contrato porque sentía que tenían una opción real en Cleveland de ser campeones, no pocos pensaron que sin duda estaba exagerando. Se daba por hecho que los Cavaliers eran y son un buen equipo, pero de igual modo que competir con los mejores les quedaba algo lejos. Pues bien, por los menos en temporada regular están callando más de una boca.
Los chicos dirigidos desde el banquillo por Kenny Atkinson han comenzado el curso como un auténtico ciclón; tanto es así que tras ganar anoche a Orlando Magic por 120-109 se han colocado con un inmaculado balance de 6-0. ¿Quiere decir eso que han tocado techo? No lo parece.
Contra la organización de Florida estuvieron realmente bien tanto Darius Garland, autor de 25 puntos, como Donovan Mitchell, con 22, pero también hubo actuaciones algo más discretas como la de un Evan Mobley que firmó un doble-doble de 14 puntos y 12 rebotes. La sensación es que están jugando muy bien, pero sin llegar a forzar demasiado la máquina.
Volviendo al partido, lo cierto es que los Magic apenas ofrecieron resistencia sin Paolo Banchero. El primer cuarto terminó con un aplastante 34-16 y a partir de ahí los de Ohio se dedicaron a seguir la ruta marcada sin contratiempo alguno. Tan cómoda fue la noche que el único jugador del quinteto inicial que superó los 30 minutos de juego fue el ya mencionado Mobley.
Primer paso sin Banchero
Vienen curvas para Orlando. Tras un buen comienzo de campaña ahora se han encontrado con la baja indefinida de Paolo Banchero a causa de un desgarro en el oblicuo derecho. Para el alero supone un enorme contratiempo a una temporada en la que estaba dando un gran paso al frente al promediar hasta 29 puntos, 8,8 rebotes y 5,6 asistencias.
Sin su máxima estrella en pista, los Magic no pudieron hacer frente al vendaval local pese a los 27 puntos de Jalen Suggs. Franz Wagner, quien debería coger el testigo de Banchero, se quedó en 17 tantos a los que añadió 8 rebotes y 6 asistencias.